Deporte y embarazo: ten en cuenta estas precauciones para realizar una práctica segura

La idea de realizar deporte durante el embarazo preocupa a muchas mujeres.

Históricamente la comunidad médica ha sido muy conservadora en este sentido, desaconsejando la práctica de deporte en muchos casos ante el miedo de que causara complicaciones en la gestación.

Sin embargo, es importante entender que uno de los motivos para ello era la falta de estudios científicos que indicaran los beneficios y contraindicaciones exactas que se debían tener en cuenta.

Hoy en día conocemos mucho más sobre el impacto positivo que puede tener el deporte para la salud de la madre, y por tanto existe unanimidad a la hora de recomendar algún tipo de actividad física durante el embarazo.

En el artículo de hoy te contamos todo lo que debes tener en cuenta a la hora de elegir la actividad que mejor se adapte a tu situación.

Ejercicio físico ¿sí o no?

Como te comentábamos, en los últimos años hemos sabido mucho más sobre los beneficios que tiene el realizar deporte durante el embarazo gracias a la investigación científica.

Ahora sabemos que el ejercicio físico te permite conseguir unos valores adecuados de tensión arterial, favorece un peso saludable en la mujer durante el embarazo, te ayuda a controlar tus niveles de glucosa en sangre y fortalece tu musculatura, fundamental para aliviar dolores lumbares.

Además ayuda de forma crítica a prevenir disfunciones del suelo pélvico que pueden producirse como resultado de la gestación, entre otras  la incontinencia urinaria.

Pero eso no es todo. El deporte puede, además, tener un impacto muy significativo en factores emocionales: potencia la autoestima, mejora tu estado de ánimo, reduce tus niveles de estrés y contribuye a que te sientas más relajada. Ten en cuenta que tu salud emocional es muy importante, y aunque todavía hay camino por recorrer, la comunidad científica conoce ya el nexo que existe entre ella y la salud de tu bebé.

Por todos estos motivos la respuesta es, sin duda, sí. La actividad física está altamente recomendada durante el embarazo y encontrar la práctica que mejor se adapte a tu situación tiene numerosos beneficios.

Precauciones que se deben tener en cuenta

Y es que si en algo está de acuerdo la comunidad científica es en que el plan de ejercicio debe ser completamente personalizado. Cada mujer y cada embarazo son un mundo. Aunque veas a tu mejor amiga hacer boxeo hasta bien entrado el tercer trimestre, eso no significa que puedas hacer lo mismo con garantías.

El objetivo principal de tu plan de ejercicios debe ser conseguir lograr esos beneficios sin comprometer el desarrollo de tu bebé.

Y en este sentido es importante destacar que la mayoría de complicaciones que el deporte puede producir durante el embarazo se deben sobre todo a dos factores:

• Por un lado, los embarazos llamados ‘de riesgo’ como puedan ser la gestación gemelar, los casos de abortos de repetición, riesgos de parto prematuro u otros casos individuales
• Por otro, los riesgos inherentes a ciertos tipos de deporte

Por ejemplo, los deportes que conlleven un riesgo de impacto, que puedan generar traumatismos en el feto están por motivos obvios desaconsejados. También debes evitar los deportes de esfuerzo brusco que hagan subir tus pulsaciones en exceso, ya que pueden llegar a afectar al aporte de oxígeno al feto. 

También es importante evitar aquellas prácticas que impliquen cambios repentinos de posición en tu cuerpo, como puede ser el salto de vallas.

Claves a la hora de elegir tu deporte

Teniendo en cuenta todo esto, el siguiente paso sería elegir el deporte ideal adaptado a tu caso.

¿Qué otros factores debes tener en cuenta a la hora de hacer tu elección?

1. Frecuencia. Debes empezar con calma en las primeras semanas de embarazo. Lo ideal es realizar algún tipo de actividad unas 2 o 3 veces por semana en el primer y tercer trimestres. Durante el segundo trimestre puedes aumentar tus sesiones, hasta un máximo de 4 o 5 por semana.
2. Nivel de impacto. Debería ser muy bajo en el primer y tercer trimestre, y bajo en el segundo trimestre. En general aquellos movimientos que puedan generar compresión-descompresión en el abdomen están desaconsejados.
3. Duración. Mantén tus sesiones con una duración limitada, de unos 10 o 20 minutos durante el primer trimestre. En el segundo y tercer trimestre puedes aumentar ligeramente la duración pero en cualquier caso las sesiones de más de 40 minutos no se aconsejan en general. 

Las mejores opciones durante el embarazo

Con todo esto quizá te estés preguntando cuáles son las opciones más seguras y recomendadas para practicar deporte durante el embarazo. Te contamos algunas de nuestras opciones favoritas:

1. Caminar. Sin duda la opción por excelencia. Ponte unas zapatillas cómodas y anímate a caminar a un paso tranquilo. 
2. Aquagym. Los beneficios de los deportes que incluyen inmersión en el agua han sido probados una y otra vez en numerosos estudios científicos. Este tipo de deportes son además una opción perfecta para desarrollar la fuerza sin impacto.
3. Yoga o pilates. Muchos centros ofrecen clases específicamente diseñadas para mujeres embarazadas, ya que estas disciplinas son una forma muy buena de trabajar la parte emocional a la vez que se ejercita el cuerpo con el mínimo impacto.

1. ¿El mejor deporte? El sexo con tu pareja. Mantener relaciones sexuales durante el embarazo es totalmente seguro y está altamente recomendado en la mayoría de casos. En este artículo de nuestro blog te contamos todo lo que necesitas saber sobre el sexo durante el embarazo.

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